Procesan con prisión al tío del presidente de Paraguay en Durazno
Aeronave que piloteaba fue obligada a descender en Santa Bernardina. Dio un nombre falso. Policía cree que es parte del Operativo Wayra. Su expediente criminal.
Uno de los detenidos por el caso de la avioneta con droga detenida en Durazno es tío del presidente de Paraguay, Horacio Cartes.
El 29 de julio aviones de combate de la Fuerza Aérea Uruguaya interceptaron a una aeronave de origen paraguayo que volaba en forma irregular. Fue detectada ingresando por la zona de Bella Unión sobre las 11 y 20 de esa mañana, informa el diario El Acontecer.
El detenido dijo llamarse Juan Walberto Gómez, de 65 años, aunque no presentó documentación alguna. La Policía paraguaya determinó su verdadera identidad: Juan Domingo "Papacho" Viveros Cartes.
Fue condenado a 17 años en Brasil y tiene una orden de captura vigente en Paraguay. Posee un profuso prontuario por narcotráfico que se inició en 1985. El diario paraguayo ABC publicó que Viveros Cartes también ha trabajado infiltrado en organizaciones nacotraficantes reclutado por la DEA, la agencia antidrogas estadounidense.
Viveros Cartes tripulaba una aeronave Cessna 210 "Centurión", matrícula ZP-TMF.
Fue procesado por la justicia como presunto autor penalmente responsable de los delitos previstos en el artículo 201 del Código Aeronáutico.
La Policía no pudo determinar qué estaba haciendo el paraguayo en territorio nacional.
No se hallaron drogas en la aeronave, como se presumía en principio.
Sin embargo, los investigadores sospechan que forma parte de la red de narcotráfico capturada en el marco de la “Operación Wayra”. Allí sí se encontraron 400 kilos de marihuana en la nave detenida.
Se supo por primera vez de Viveros Cartes cuando en 1985 se incautaron, en la estancia de Adilson Rosatti, precursores químicos para hacer cocaína, acetona y éter, entre otras sustancias.
Juan Domingo "Papacho" Viveros Cartes fue reclutado por agencia antidrogas estadounidense. En carácter de tal. ealizó varios vuelos con cargas de drogas. Estos vuelos eran conocidos con el nombre de "entrega vigilada". Estos trabajos de infiltración le permitieron estar libre.
Fue protagonista del llamado "Caso Parque Cue" (1990). Este operativo se realizó en camino a Madrejón, a 200 kilómetros de Filadelfia. Allí la DEA y la agencia antidrogas paraguaya Senad incautaron 349 kilos de cocaína. La mercadería iba a Colombia a instancias del cartel de Medellín.
En 1994 un cargamento de 756 kilos de cocaína fue requisado en un operativo llamado "Taguá" en la zona de Fuerte Olimpo, en el Chaco paraguayo. El trabajo de Viveros Cartes como infiltrado fue fundamental para la DEA y los organismos regionales antidrogas.
Luego Viveros Cartes se “guardó” hasta 2001. Ese año DEA detuvo en San Pablo una aeronave de bajo porte con 250 kilos de cocaína.
La nave estaba al mando otra vez de Viveros Cartes, quien fue procesado y condenado a 17 años de cárcel en el Brasil. El hecho se asemeja mucho a los ocurrido ahora en Durazno.
Hacía tiempo que el tío del presidente no estaba en la palestra. En 2007, acogiéndose a un tratado de extradición entre Brasil y Paraguay, “Papacho” consiguió no sólo volver a su país, sino que, además, obtuvo una beneficiosa reclusión domiciliaria.
Desde entonces no se supo nada del exrecluso. Reapareció en una avioneta en cielo uruguayo el 29 de julio. Unas horas después cayeron César Morel Roa y Francisco Sarubbi, dos importantes narcotraficantes. Morel había pasado largo tiempo en Montevideo y venía siendo seguido por la Brigada Antinarcóticos de Uruguay. Él fue el encargado de la logística del envío desde Paraguay de la marihuana incautada en la avioneta detenida en la zona de Cebollatí. Era la llamada “Operación Wayra” que estaba rindiendo sus frutos. Ahora resta saber de qué lado de la línea estaba “Papacho” Viveros Cartes.
El 29 de julio aviones de combate de la Fuerza Aérea Uruguaya interceptaron a una aeronave de origen paraguayo que volaba en forma irregular. Fue detectada ingresando por la zona de Bella Unión sobre las 11 y 20 de esa mañana, informa el diario El Acontecer.
El detenido dijo llamarse Juan Walberto Gómez, de 65 años, aunque no presentó documentación alguna. La Policía paraguaya determinó su verdadera identidad: Juan Domingo "Papacho" Viveros Cartes.
Fue condenado a 17 años en Brasil y tiene una orden de captura vigente en Paraguay. Posee un profuso prontuario por narcotráfico que se inició en 1985. El diario paraguayo ABC publicó que Viveros Cartes también ha trabajado infiltrado en organizaciones nacotraficantes reclutado por la DEA, la agencia antidrogas estadounidense.
Viveros Cartes tripulaba una aeronave Cessna 210 "Centurión", matrícula ZP-TMF.
Fue procesado por la justicia como presunto autor penalmente responsable de los delitos previstos en el artículo 201 del Código Aeronáutico.
La Policía no pudo determinar qué estaba haciendo el paraguayo en territorio nacional.
No se hallaron drogas en la aeronave, como se presumía en principio.
Sin embargo, los investigadores sospechan que forma parte de la red de narcotráfico capturada en el marco de la “Operación Wayra”. Allí sí se encontraron 400 kilos de marihuana en la nave detenida.
Se supo por primera vez de Viveros Cartes cuando en 1985 se incautaron, en la estancia de Adilson Rosatti, precursores químicos para hacer cocaína, acetona y éter, entre otras sustancias.
Juan Domingo "Papacho" Viveros Cartes fue reclutado por agencia antidrogas estadounidense. En carácter de tal. ealizó varios vuelos con cargas de drogas. Estos vuelos eran conocidos con el nombre de "entrega vigilada". Estos trabajos de infiltración le permitieron estar libre.
Fue protagonista del llamado "Caso Parque Cue" (1990). Este operativo se realizó en camino a Madrejón, a 200 kilómetros de Filadelfia. Allí la DEA y la agencia antidrogas paraguaya Senad incautaron 349 kilos de cocaína. La mercadería iba a Colombia a instancias del cartel de Medellín.
En 1994 un cargamento de 756 kilos de cocaína fue requisado en un operativo llamado "Taguá" en la zona de Fuerte Olimpo, en el Chaco paraguayo. El trabajo de Viveros Cartes como infiltrado fue fundamental para la DEA y los organismos regionales antidrogas.
Luego Viveros Cartes se “guardó” hasta 2001. Ese año DEA detuvo en San Pablo una aeronave de bajo porte con 250 kilos de cocaína.
La nave estaba al mando otra vez de Viveros Cartes, quien fue procesado y condenado a 17 años de cárcel en el Brasil. El hecho se asemeja mucho a los ocurrido ahora en Durazno.
Hacía tiempo que el tío del presidente no estaba en la palestra. En 2007, acogiéndose a un tratado de extradición entre Brasil y Paraguay, “Papacho” consiguió no sólo volver a su país, sino que, además, obtuvo una beneficiosa reclusión domiciliaria.
Desde entonces no se supo nada del exrecluso. Reapareció en una avioneta en cielo uruguayo el 29 de julio. Unas horas después cayeron César Morel Roa y Francisco Sarubbi, dos importantes narcotraficantes. Morel había pasado largo tiempo en Montevideo y venía siendo seguido por la Brigada Antinarcóticos de Uruguay. Él fue el encargado de la logística del envío desde Paraguay de la marihuana incautada en la avioneta detenida en la zona de Cebollatí. Era la llamada “Operación Wayra” que estaba rindiendo sus frutos. Ahora resta saber de qué lado de la línea estaba “Papacho” Viveros Cartes.
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