MACRISMO Y LIBERTAD DE PRENSA / Atilio Boron

En la madrugada de ayer una banda criminal ("patota", en el argot porteño) atacó las instalaciones del diario Tiempo Argentino y Radio América, ambas bajo control de una cooperativa de periodistas ante la fuga de sus ex propietarios que abandonaron ambos medios dejando sin pago a los trabajadores y a los proveedores. Estos "empresarios" fueron los elegidos por el kirchnerismo para librar la batalla mediática contra la prensa hegemónica, lo cual demuestra que el criterio con que se tomaban ciertas decisiones en la Casa Rosada no podía ser más equivocado. Fueron dos simples mercachifles de la prensa que actuaron como oficialistas durante el gobierno de Cristina y que, una vez consumada la derrota electoral, huyeron dejando detrás de sí un tendal de damnificados.

El accionar de las patotas contra los periodistas no es nuevo en la Argentina. Pero hoy, bajo el gobierno de Macri, los vándalos actuaron ante la indiferencia, cuando no la protección, ¡de la Policía Federal!. Sería exagerado comparar este lamentable suceso con lo que fuera la norma en la Italia de Mussolini o en la Alemania de Hitler, pero la promiscua relación entre policía y patotas no deja de ser un rasgo ominoso que no puede ser pasado por alto y que sintetiza muy bien lo que en la Argentina de Macri se entiende por "libertad de prensa" o "pluralismo informativo".

Termino enviando toda mi solidaridad para los trabajadores de Tiempo Argentino y Radio América, profesionales de primera castigados brutalmente por defender sus ideas..